“Pareidolia, la forma de los sueños”, de Javier Naudeau
En El Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034 – CABA) – Domingos
a las 20:00.
Cuando los sueños
se cumplen, cuando no, y cuando parece que sí pero no.
Todos
sabemos que los sueños complejos son de difícil concreción; viajar a la luna,
ser presidente, lograr la juventud eterna. Ojo que igual no es imposible;
alguno ya ha pisado el espacio, todos los países tienen un presidente. Y Nacha
Guevara. Pero bueno, parece ser sólo el destino de unos pocos elegidos. Ahora
la pregunta del millón es: se entiende la dificultad de los primeros, pero ¿por
qué se vuelve tan complicado alcanzar el sueño de formar parte de una familia,
de no estar tan solo o de hacer un viaje? “Pareidolia, la forma de los
sueños” intenta responder estos interrogantes y algunos más, todos simples
y dolorosamente inalcanzables. Y en serio, gente… ¿por qué se ha vuelto tan
épicamente imposible que alguien te alcance amorosamente una taza de café
mientras jugás en la computadora?
Un sueño en común entre Willy y Luciano los lleva a una idea que puede ser perfecta o peligrosa. Pero el plan se frustra cuando el secreto de Nerea, la hermana menor de Luciano, se descubre. Mientras un futuro soñado se desvanece, en paralelo, otro surge como la única posibilidad verdadera. Una madre a quien le angustian las respuestas, un padre desdibujado en el tiempo, dos hijos adolescentes con apariencia inocente y un amigo del que poco se sabe, forman un cotidiano atravesado por la ilusión, el amor y el riesgo de perder lo irrecuperable.
El texto es bellamente cotidiano;
imposible no sentir empatía por alguna de las situaciones planteadas o no
reconocerse en algún silencio, desilusión o dolor. Los cinco actores
interpretan con verdad el libro de Javier Naudeau destacándose, tanto por
personajes como por actuaciones, el trabajo de los jóvenes Juan Manuel Artaza,
Juan Cottet y Violeta Postolski. A ellos les cabe la responsabilidad de los
primeros sueños y la lucha por llevarlos a cabo. Este trío funciona perfecto en
sus relaciones e interpretaciones, son sensibles, pasionales y carismáticos;
verlos en escena se disfruta de punta a punta. Los padres, jugados por Heidi
Fauth y Claudio Amato, se suman a esta dinámica logrando, entre otras, una
memorable escena en la cual, durante una cena familiar, el invitado agradece y
pide un abrazo. Hermosa perlita dramatúrgica e interpretativa.
La escenografía es atrayente, compuesta
por una sumatoria de estructuras metálicas, y de colores grises y blancos con
perfectas simetrías. Todo es muy sobrio y hasta frío y distante. Imposible
que los personajes puedan soñar allí, es casi una cárcel. Muy bien; buen trabajo de Alicia Leloutre
y José Escobar.
El espectáculo es muy bueno;
interesante visión de Javier Naudeau no sólo como dramaturgo sino también como
director. Su propuesta sobre sentimientos y realidades que no son pero que se
finge que sí es originalísima, tanto como el título de su obra.
“Pareidolia” es una buena cita con el
teatro. Muy recomendable.
Dramaturgia: Javier Naudeau
Elenco: Juan Manuel Artaza, Juan Cottet, Violeta Postolski,
Heidi Fauth y Claudio Amato.
Dirección: Javier Naudeau
Duración:
65 minutos
Alberto Maffía,
para “AM CRÍTICA TEATRAL”
https://amcriticateatralbaires.blogspot.com
contacto: escenateatro73@gmail.com
instagram: @amcriticateatral
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